En una respuesta publicada al artículo de Andrew Jack, «Mea culpa: son miles de millones de dólares las multas a las compañías farmacéuticas» (BMJ Online, 18 de julio de 2012), la revista Prescrire insiste en la necesidad de acabar con la influencia indebida de la Industria, que no se detiene en los médicos como sugiere la promoción ilegal de antidepresivos por parte de GSK, sino que también alcanza a las autoridades de salud, como corrobora la catástrofe de Mediador (benfluorex)
Por estos motivos, la revista Prescrire está totalmente financiada por sus suscriptores, no tiene subsidios, publicidad o patrocinadores: El acceso a datos independientes y fiables es esencial para tomar decisiones informadas.
Afortunadamente crece el número de profesionales de la salud que responden «no gracias»…