Algunos expertos dicen que la tristeza se está medicalizando debido a la ampliación de los criterios establecidos (DSM-5) para su definición. Un caso claro de sobrediagnóstico y sobretratamiento.

En un artículo de opinión del British Medical Journal, se destaca que el diagnostico de depresión se ha multiplicado por dos y que la prescripción de medicamentos antidepresivos se incrementó en un 10%, en apenas una década en Inglaterra. Lo que ocurre, a pesar de que el NICE (National Institute for Care Excellence) considera que la primera linea para el tratamiento de la depresión leve del adulto es la intervención psicológica y los programas de actividad física.

Para NHS-CHOICES hay un evidente peligro de medicalizar las experiencias humanas y sustituir el apoyo humano por fármacos antidepresivos.

Mientras publicabamos está entrada, recibimos el último trabajo del blog de POSTSIQUIATRIA: «Ocho artículos sobre fármacos antidepresivos y una reflexión sobre el efecto placebo». Una revisión muy recomendable de Amaia Vispe y Jose Valdecasas. «…no deberíamos olvidar que la tristeza es una emoción humana legítima y que las píldoras de la felicidad no existen.»